La historia y evolución del Logo Peugeot

El 20 de noviembre de 1858 Émile Peugeot (padre de Armand Peugeot y que a posteriori sería el fundador de la Marca tal y como la conocemos hoy en día) registró en el Conservatorio Imperial de Artes y Oficios un león como símbolo de Peugeot.

La razón de elegir a este animal como imagen de Peugeot es que el rey de la selva representa las cualidades por las que se conocían las sierras Peugeot de aquel entonces: resistentes como sus dientes, flexibles como su espinazo y rápidas en el corte como la agilidad de este felino.

La evolución del león a lo largo de 200 años

El nacimiento del logo del león es anterior a los primeros vehículos Peugeot. El león que mira hacia la izquierda y se posa sobre una flecha aparece en herramientas y sierras y, según avanza el tiempo, en molinos de café (desde 1881) bicicletas (desde 1882) y motocicletas (desde 1898).

Aunque la fabricación de automóviles Peugeot data de 1889, habrá que esperar hasta 1905 para que aparezca el primer león en un automóvil. Este primer logo todavía conservaba este aspecto, posado sobre sus cuatro patas encima de una flecha y en el caso de modelos como el Peugeot Bébé se moldeaba sobre el cromado de la calandra en su parte superior.

En los años 20 el león pasa de las dos a las tres dimensiones: los escultores Marx y Baudichon realizan una propuesta de león (el primero rugiendo, el segundo a punto de saltar) que servían como tapa de radiador, se distribuían a través de la red y eran un guiño a los ‘Peugeotistas’.

En los años 30 la figura del león de Peugeot cambia. Todos los modelos Peugeot de esta época llevan una cabeza de león coronando la calandra y con las fauces abiertas. Modelos como el Peugeot 301, 401 y 601 incluían este león.

Con el cambio de generación, se mantiene este mismo concepto pero se estiliza el felino: el Peugeot 402, en 1935, recibe el sobrenombre ‘el cohete de Sochaux’ (fuseauSochaux) y ese espíritu se nota también en su logo del león.

En 1948 se produce el primer gran punto de inflexión. El logo de Peugeot adopta un estilo heráldico, del escudo de armas del Franco Condado, que recuerda al actual por primera vez en su historia al apoyarse en dos patas. Nace con en el Peugeot 203 y su posición varía, llegando a situarse, también, incluso en el centro del volante. Este tipo de emblema se mantiene con mínimas variaciones hasta la década de los 60 ya que en 1955, y por motivos de seguridad, las cabezas de león dejan paso a este signo plano en toda la gama.

En 1960, el Peugeot 404 diseñado por Pininfarina estrena un nuevo león, más imponente y con las crines al viento, sobre el que aparece la inscripción con el nombre de la Marca y que está presentado en tonos cobrizos y dorados. En 1968 se produce otro salto hacia delante, ya que el Peugeot 504 muestra al mundo un león similar pero sin el característico marco que le acompañó durante décadas.

Esta generación del león estaría presente durante los próximos años hasta que, en 1975, se produce otra de las grandes revoluciones. El conocido como ‘león delineado’ o incluso ‘león de alambre’ hace entrada en escena en el Peugeot 604. Incrustado en el corazón de la calandra, entre la rejilla, siluetea la figura del león sobre dos patas. Supone el salto completo del logo de Peugeot a la era contemporánea. La presencia de este león se mantendría durante años y modelos con modificaciones según el caso concreto. Por ejemplo, en el Peugeot 205 sobre fondo negro o en el Peugeot 306.

En 1998, el león cobra cuerpo y gana en imponencia gracias al juego de materiales que le otorga el relieve metálico. En 2010 estrena nueva postura, con líneas más modernas y un doble acabado mate y brillante que le da un aspecto elegante y atemporal. A partir de ese momento, comienza a aparecer directamente sobre el capó de los modelos Peugeot, prescindiendo del cuadro negro que le acompañaba. El encargado de introducir estas novedades fue el Peugeot SR1, presentado en el Salón de Ginebra y que anticipó la imagen de marca actual.

Y como un guiño a sus 200 años de vida, el Nuevo Peugeot 508, el último lanzamiento de la Marca, mantiene el logo que se presentó en 2010 pero lo devuelve al centro de la calandra. Un auténtico homenaje al espíritu y la historia de Peugeot.