De los circuitos a la carretera

Un sistema formado por una cámara externa y un monitor interior garantizan al conductor una visibilidad ideal.

Esta nueva tecnología de Audi aparecerá por primera vez en un coche de producción con el R8 e-tron.

Exitoso estreno en su debut en el Audi R18 en las 24 Horas de Le Mans.

Audi ya tiene lista una nueva tecnología que contribuirá a hacer la conducción más segura: el retrovisor interior digital, previsto para entrar en producción con el Audi R8 e-tron a finales de este año, que proporciona imágenes brillantes y de gran calidad. Al igual que los Audi R18 ganadores en las últimas 24 Horas de Le Mans, el Audi R-8 e-tron no tiene luneta posterior, por lo que no existe la posibilidad de utilizar un espejo retrovisor convencional. Su sucesor es un sistema de alta tecnología compuesto por una cámara y un monitor.

El nuevo retrovisor digital que debutará en un coche de producción en el Audi R8 e-tron a finales de 2012, es una más de las muchas tecnologías que Audi ha ensayado primero en competición. Su deslumbrante estreno se produjo en la pasada edición de las 24 Horas de Le Mans, donde el nuevo sistema de alta tecnología mostró su fiabilidad incluso bajo las duras condiciones de una carrera de resistencia.

Los pilotos de los Audi R18 que ocuparon las tres primeras posiciones en la meta apreciaron las enromes ventajas de este sistema en un vehículo cerrado, sin posibilidad de instalar un espejo retrovisor convencional: entre ellas, ausencia de vibraciones o una imagen clara incluso en condiciones de visibilidad reducida, como en conducción nocturna o debido a inclemencias meteorológicas. Las mismas ventajas que tendrán los conductores del Audi R8 e-tron.

El sistema de retrovisor digital de Audi se compone de una unidad de control que produce una imagen brillante de alto contraste. Utiliza una cámara trasera pequeña y ultra ligera, alojada en una carcasa optimizada aerodinámicamente en la parte posterior del vehículo, y que cuenta con calefacción cuando la temperatura exterior es fría, para evitar el empañamiento. La lente tiene un diámetro de apenas unos pocos milímetros, y abarca un campo de visión mucho más amplio que proporciona un espejo retrovisor convencional.

En el habitáculo, un monitor en color con una pantalla de 7,7 pulgadas ubicado en el lugar donde normalmente se situaría el espejo retrovisor muestra las imágenes digitales recogidas por la cámara. La pantalla utiliza la revolucionaria tecnología AMOLED (siglas en inglés de Active Matrix Organic Light Emitting Diode, o Matriz Orgánica Activa de Diodos Emisores de Luz) desarrollada por LTD, socios de Samsung Display Co. Los materiales orgánicos utilizados se auto iluminan con una tensión muy baja, por lo que la pantalla no necesita retroiluminación.

La tecnología AMOLED ya ha mostrado su valía en teléfonos móviles y dispositivos portátiles en el segmento de la electrónica de consumo. Son pantallas más delgadas, ligeras y eficientes energéticamente que los monitores convencionales LCD, y presentan unos tiempos de conmutación de apenas unos pocos milisegundos, independientemente de la temperatura ambiente.

La unidad de control inteligente produce una imagen brillante y de alto contraste, y evita de forma automática que se produzcan deslumbramientos debido a las luces de otros vehículos. El conductor puede regular el brillo de la pantalla, o incluso apagarla en cualquier momento. Además de las imágenes recogidas por la cámara trasera, Audi ya trabaja para que en un futuro el retrovisor digital pueda mostrar también informaciones adicionales que sirvan de ayuda al conductor.