¿Qué pensarías si te dijera que BMW ha iniciado los trámites para proteger las denominaciones 825, 830, 835, 840, 845, 850, M850 y M8?

Si lo que has deducido es que la vuelta del BMW Serie 8 es inminente, has dado en el clavo. No solo eso sino que, si la marca alemana ha tomado esta decisión es porque, desean transformar el BMW Serie 6 en un digno rival de modelos como el Porsche 911 o el Mercedes AMG GT.

Según Auto Express, para el M8, el modelo tope de gama, BMW se podría decantar por un motor 4.4 V8 biturbo de 450 CV lo que permitiría a los Serie 850 y M850 hacer uso del motor 5.0 V12 de 450 CV que ya visten los BMW Serie 7. Esto convertiría al Serie 8 en competencia directa de los Mercedes Clase S Coupé.

¿Qué ocurre con el Serie 6?

En cuanto al Serie 6, hasta hace poco, BMW no había considerado al Porsche 911 como un posible competidor. Sin embargo la llegada del Mercedes AMG GT al mercado ha cambiado su perspectiva. Ahora mismo su objetivo es cubrir el hueco, que percibe entre sus modelos, y por eso quiere rediseñar el Serie 6 Coupé para convertirlo en un vehículo deportivo más compacto y ágil.

Probablemente se asentará sobre la plataforma que BMW y Toyota han estado desarrollando para la nueva generación del BMW Z4 y para el futuro Toyota Supra. Teniendo en cuenta que esta plataforma es “escalable” y que las ventas anuales del Z4 no son muy elevadas le resultará muy rentable, a la marca bávara, adaptarla para el nuevo Serie 6.

De esta propuesta se entiende que el BMW Serie 6 Gran Coupé dejaría de fabricarse y que de sobrevivir tendría que hacerlo en una versión Gran Coupé del Serie 8, que se uniría a las versiones Coupé y Cabrio.

Por ahora no tenemos más información pero todo parece indicar que los dos nuevos modelos llegarían al mercado antes del año 2020.

Fuente: Autoexpress.co.uk.